San Teodoreto de Ciro (ca. 393 - ca. 458 [o 466]) fue un cristiano nacido en Antioquía de una profunda cultura y con una seria piedad. Su familia, de honda raíces cristianas, fue una familia rica y noble que formaba parte de la Curia de la ciudad, lo que le permitió recibir una buena formación académica desde muy temprana edad.

Su madre, habiendo sido estéril, logró dar a luz después de dieciséis años de matrimonio gracias a las oraciones del monje san Macedonio de Siria († ca. 420). En gratitud sus padres lo bautizaron con el nombre de Θεοδώρητος (theodóretos: Θεο, “Dios” δώρητος, “regalo” | “Don de Dios”).

Recibió su educación en el monasterio de San Eutropio, cerca de Antioquía. Fue ordenado lector muy joven. En teología estudió principalmente los escritos de san Diodoro de Tarso († ca. 390), san Juan Crisóstomo († 407) y san Teodoro de Mopsuestia († ca. 428). También tuvo una buena educación en filosofía y literatura. Entendía el siríaco y el griego pero no estaba familiarizado ni con el hebreo ni con el latín.

A los 22 o 23 años, habiendo muerto sus padres, repartió a los pobres toda su fortuna heredada como hijo único (Epist. CXIII; PG LXXXIII, 1316), para hacerse monje y cumplir su deseo de ofrecerse a Dios. Fue ordenado diácono por el obispo san Porfirio de Gaza (ca. 347-420) y elegido obispo de Ciro en ca. 423. Participó en el concilio de Éfeso (año 431) que condenó a Nestoriano († ca. 451). Murió en el obispado de Ciro o en un monasterio cerca de Apamea.

Para los maronitas es un autor importante no solo por su teología bíblica, sino sobretodo porque recoge una breve semblanza –la más importante que se conserva– de san Marón († ca. 410), en su gran obra Historia de los Monjes de Siria (ca. 444), en su capítulo XVI.

Fue un escritor prolífico. Sus obras, discursos y cartas han sobrevivido hasta nuestros días en forma interpretativa (exégesis), histórica, apologética, dogmática y polémicas. La primera colección de sus obras fue publicada por el jesuita Jacques Sirmond (1559-1651) en 1642 (reimpresas en PG LXXXIII, 1173-1409).

Algunas de sus obras, además la citada Historia de los Monjes de Siria son: Sobre la Santísima Trinidad, Interpretación de la Profecía del santo Jeremías, Interpretación de la Profecía del santo Ezequiel, Memoria de las Visiones del profeta Daniel, Curación de las Enfermedades Griegas, Contra-anatematismos, Diez sermones sobre la Providencia, Cuestiones el Octateuco, Historia de las Herejías, entre otras.