La etimología de la palabra Ambry procede la forma latina medieval Almarium, y esta de la forma latina antigua Armarium, que en español corresponde al término Armario.

Como tal es un gabinete empotrado en la pared para almacenar los tres santos óleos consagrados por el obispo para el uso de los santos sacramentos: el Óleo de los Catecúmenos, el Myron, y el Óleo de los Enfermos.

También se llegó a utilizar para guardar el cáliz, la patena y el copón. La palabra Ambry pasó a la tradición maronita en época tardía, el término propio para este armario es el de ܒܶܝܬ ܡܳܐܢ̈ܶܐ ܕܡܶܫ̈ܚܳܢܶܐ (beyt mone dmeshḥone) es decir, Alacena para las Alcuzas.