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Iglesias Siríacas: primera reunión desde el siglo V

Actualizado: 7 ene

El cardenal Bechara Rai, patriarca de la Iglesia Siríaca Maronita de Antioquía, se reunió en Atchane con los patriarcas de las otras cuatro Iglesias Siríacas para reanudar los lazos rotos desde los concilios del siglo V. Esta reunión estableció una visión común para afrontar el éxodo de los cristianos, su aculturación y la pérdida de su identidad.


#sancharbel

Por: Dr. Amine Jules Iskandar

Syriac Maronite Union-Tur Levnon

Asociado de maronitas.org

Escrito para Ici Beyrouth

Publicado el 26 de diciembre de 2022


El Patriarca Maronita, cardenal Bechara Rai, viajó a Atchane el 16 de diciembre (n. del tr.: de 2022) para participar en la reunión de los Patriarcas de las Iglesias Siríacas. Se trata de la primera reunión de este tipo desde el cisma de los siriacos orientales en el Concilio de Éfeso en 431, y la separación de los maronitas de los otros siriacos occidentales tras el Concilio de Calcedonia en el 451.


Concile de Chalcédoine en 451. ©Philosophie du christianisme
Concilio de Calcedonia en 451. ©Philosophie du christianisme.

Acercamientos esporádicos


Lo que las Iglesias Jacobita (hoy Ortodoxa Siríaca) y Maronita habían vivido como fructíferos intercambios en la Edad Media en el Monte Líbano, hubo de interrumpirse brusca y definitivamente en el siglo XVI, a raíz de influencias romanas como la del franciscano maronita Gabriel Barcleius, seguida de las misiones vaticanas de los jesuitas Tommasso Raggio, Giovanni Battista y Girolamo Dandini.


Se han celebrado reuniones más recientes, pero en el marco más amplio del ecumenismo, con la participación de las diversas ramas católicas, ortodoxas y protestantes, y sin tocar el fondo de la cuestión siríaca.


Así pues, por primera vez desde el siglo V, las diferentes Iglesias Siríacas Orientales (Asiria y Caldea) y Occidentales (Maronita, Siro-Ortodoxa y Siro-Católica) se han reunido para desarrollar una visión común que comprometa su identidad cultural e histórica, así como su presencia y supervivencia frente a los desafíos actuales.


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Los Patriarcas de Antioquía, Mar Bechara Boutros Rai y Mor Ignatios Ephrem II. ©Bkerke

Cumbre de los Patriarcas


Los patriarcas de las cinco Iglesias Siríacas, Ignatios Ephrem II por los siríacos ortodoxos, Ignatios Joseph III Younan por los siríacos católicos, Bechara Boutros Rai por los maronitas, Louis Raphael Sako (vía internet) por los caldeos y Awa III Roel por los asirios, se reunieron en la sede patriarcal siríaco-ortodoxa de Atchane.


Los prelados hablaron de los elementos comunes a sus Iglesias, desde su patrimonio cultural, lingüístico y artístico hasta las vicisitudes de la historia, que han incluido masacres, genocidios y aculturación. Pues, declararon, el arraigo de los cristianos en sus tierras ancestrales se realiza mediante la transmisión de su cultura y la cohesión entre sus diversos componentes. Esto último se consigue salvaguardando la herencia siríaca que une a los hijos de estas iglesias y las federa, subrayaron.


Este patrimonio no puede abordarse sin mencionar el carácter decisivo de su particular espiritualidad, en la medida en que está viva y omnipresente tanto en el ámbito eclesiástico como en el profano, donde forma parte de la vida cotidiana. Los cinco patriarcas señalaron así el papel crucial de la fe y la tradición cristianas, que han permitido a sus respectivas comunidades sobrevivir a la opresión, las guerras, la persecución y el genocidio a lo largo de los siglos.


Sin embargo, expresaron el reto existencial más grave hoy en día, el de la emigración. Las nuevas parroquias fundadas en Occidente nunca podrán mantener viva esta cultura sin la presencia de un núcleo principal en sus tierras históricas.


La iniciativa de Atchane se ha designado intencionadamente como «primer encuentro», lo que significa que sólo inaugura una serie de reuniones de carácter anual, destinadas a elaborar un plan para la recuperación de una sociedad martirizada y erosionada. Ya se ha creado un comité de seguimiento para proseguir los esfuerzos.